Cuando este viernes acudas impelido por tu testosterona desbocada al estreno de “Machete“, no babees demasiado cuando aparezca, por ejemplo, Jessica Alba en la ducha con todo su cuerpo desnudico para tu deleite.
Eres ya mayor y te ha llegado el momento de conocer una terrible verdad: el cine son 24 mentiras por segundo. Y en esta película, por lo demás ultragamberra, extrahemoglobínica, de una elevada incorrección política y no apta para mojigatos, los cuerpos desnudos no siempre son reales. En este caso el apetitoso físico de Jessica Alba fue rodado originariamente con un escueto bikini que posteriormente, por obra y gracia de los efectos digitales, tomó la textura de su piel.
Sé que haberte desvelado este secreto no impedirá que te pongas igual de berraco, pero recuerda, no es piel, son solo ceros y unos. ¿Deseas saber más?
Concebida en principio como un “falso trailer” dentro del disparate cinematográfico “Grindhouse“, los aficionados se mostraron tan entusiasmados que “Machete” finalmente ha tenido que ver la luz como película.
Quentin Tarantino y Robert Rodríguez pretendían recuperar el sabor casposillo y lleno de imperfecciones de los programas dobles de pelis de serie B de su juventud, y concibieron cada uno la película que les habría gustado ver en su adolescencia. Tarantino demostró una vez más lo pretencioso de sus insulsos diálogos con “Death proof” y Rodríguez llenó de zombis un hospital, una ciudad, el mundo… con “Planet Terror”. Violencia gratuita, sangre, desmembramientos, disparos, un poco de carne femenina al aire… y por en medio falsos trailers de pelis que nunca se rodaron pero con ese mismo espíritu setentero, desprejuiciado y por encima de todo, gamberro.
El trailer de la nunca rodada “Machete” se convirtió en el favorito de los fans, y a estos hay que darles lo que te piden, sobre todo si están dispuestos a pagar por ello. Así que un par de años más tardes tenemos la peli en el cine, y rodeando al feísimo Danny Trejo todo un elenco de bellezas entre las que destacan Linsay Lohan, Michelle Rodríguez… y Jessica Alba.
Una escena de alto voltaje nos presenta a esta actriz en la ducha tal y como su madre la trajo al mundo. Pero por si acaso alguien veía algo que ella no quería que se viese, nada mejor que recurrir a la omnipresente postproducción digital para borrar el bikini y aplicarle a la tela blanca del mismo una capa de textura de piel humana hasta que parezca que está efectivamente desnuda, que es, por otra parte, la manera habitual de enfrentarse a una ducha. Ahora la gran duda a la que todos nos enfrentaríamos es… ¿será este el futuro de los desnudos cinematográficos?
Si quieres tener un pequeño aperitivo en movimiento, aquí puedes ver el video del “momento ducha” en cuestión y ya tú decides si te acercas al cine. [Fleshbot]
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