Qué tardes más felices en nuestra infancia gracias al Meccano.
Y qué cantidad de ingenieros habrán llevado a la práctica sus sueños de niño grande construyendo puentes, torres, edificios… complejas estructuras de muchos metros de altura y muchos millones de euros de presupuesto. Pero todavía quedamos los que tenemos que sobrellevar nuestra frustración ingenieril a pequeña escala y conformarnos, por ejemplo, con una lámpara que podemos hacer nosostros mismos, con una innegable inspiración en los Meccano y aprovechando algunos materiales de procedencia Ikea.
Los Piratas de Ikea y los Ikea Hackers son casi una casta.
Pero una casta abierta, permitiendo a todo el mundo acceder a ella, a todos los que no le tienen miedo a dar un paso más allá de la aventura que supone pelearse con la mítica llave Allen de Ikea y meterse a hibridar los objetos de esta casa nórdica entre sí o incluso con otros procedentes de las especies mobiliarias más diversas.
En el caso que nos ocupa hoy ha bastado con coger las patas de una estantería Hyllys de 8,99 €, perforarlas para asemejarlas a las legendarias piezas del Meccano y coronar el conjunto con más piezas perforadas doblándolas en forma de lámpara. Hay otra alternativa que prescinde de la lámpara y culmina con un chorro de petróleo, pero te deja el salón perdido.
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