A falta de que alguno de los hackers de Ikea o los piratas de Ikea decidan sacar su versión bricolájica y económica, la opción que nos queda para tener una mesita donde poner el portátil y que incluya sus propios altavoces es recurrir al modelo Laptop Dock LD 120 de LaBoite.
Porque el mueble decora, sí, pero también se lleva un pellizco de casi 1.000 euros de tu bolsillo. Eso sí, se escucha de lujo.
Te puede servir para sentarte ante él a remezclar tus sessions y jugar a ser un DJ famoso o bien para ver pelis con unos altavoces como Dios manda, y no esos de saldo que te pilalste en el badulaque de la esquina por menos de lo que cuesta un cubata.
O puedes dejarte una pasta en escuchar de forma decente los contenidos que reproduces en tu portátil y de paso tienes una pieza ornamental y refinada en un rincón de tu humilde morada. Casi mejor esto segundo, eso sí, previo pago de 980 € de nada, el precio por disponer de una pieza de auténtica alta fidelidad musical. Se conecta por puerto USB y cuenta en su interior con una tarjeta de sonido con conversión DAC que desprecia alegremente las capacidades hi-fi de tu portátil para encargarse ella del trabajo sucio.
Gracias a su tecnología Wide Sound proporciona un disfrute del sonido en estéreo con claridad cristalina. Dotado con un amplificador de 120W el Laptop Dock LD 120 distribuye la música por sus 7 altavoces y para poder combinarlo con los ambientes más variados presenta diversas terminaciones, desde gris antracita o rojo brillante hasta el blanco inmaculado o este elegante negro piano que aparece en la fotografía. Puedes usarlo cómodamente a modo de escritorio gracias a su superficie tapizada en piel que además aísla de las vibraciones del subwoofer y cuenta con los controles oportunos para manejar a tu antojo el sonido.
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