Puede que en el futuro no llevemos los portátiles en formato rectangular bajo el brazo a modo de carpetas sino enrollados, como cartas de navegación de un pirata o pergaminos de un senador romano.
Al menos esa parece la intención de los que han imaginado Rolltop, los diseñadores de la firma alemana Orkin a quienes los nuevos materiales flexibles les han inspirado un futuro lleno de tubos que despliegan dispositivos que hoy solo se entienden como dos láminas unidas por una bisagra. Y aún hay más.
Gracias a una pantalla OLED que se enrolla sobre sí misma este Rolltop podría desplegarse hasta ofrecernos un portátil con teclado y pantalla de 13″ o bien lo desplegamos al completo hasta obtener un "tablet" o una pantalla de hasta 17″.
Este singular portátil es aún un prototipo en fase de diseño conceptual, no salgáis todos corriendo a comprarlo todavía, pero avanza algunas soluciones que quizá con el tiempo comiencen a estar presentes en modelos comercializados. De hecho algunas firmas ya han presentado pantallas que podrían ser las que terminásemos teniendo en dispositivos de este estilo, en concreto Samsung y su AMOLED flexible con resolución 800×480 o la propia Sony.
La indudable ventaja de este tipo de pantallas está en el escueto tamaño que ocupan una vez plegadas y que las convertiría en soluciones portátiles idóneas, ocupan poco espacio cuando no las usamos y pueden ofrecer grandes tamaños cuando así se requiera. Unidos a las capacidades táctiles la imaginación puede ser el único límite. Ah, claro… el presupuesto par I+D. Maldita crisis.
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